Cuando la Selección de Diego no estuvo a la altura

Así como en la cancha gestó varias de las hazañas más importantes de la Argentina, cuando se puso el buzo de entrenador sufrió en carne propia dos derrotas que ocupan las páginas negras de la historia de la Selección. Hace 11 años, Diego Maradona comandaba el equipo que caía por 6-1 ante Bolivia, en La Paz, y esa derrota entraba en el podio junto con el 1-6 ante Checoslovaquia en el Mundial 58 y 0-5 frente a Colombia por las Eliminatorias para el Mundial 94. Más adelante, también sería protagonista desde el banco del 0-4 contra Alemania que significó la eliminación del Mundial 2010.

La goleada recibida en Bolivia fue justamente en el camino de las eliminatorias para llegar a Sudáfrica. Diego había sido recibido como un héroe en La Paz porque había sido uno de los que bancó que se juegue allí a pesar de los 3.650 metros de altura ante la posibilidad de que la FIFA lo prohibiera. Pero más allá de esa postura, el Diez subestimó los efectos que produce a la hora de correr detrás de la pelota y el plantel no llegó preparado de la mejor manera a ese encuentro. Y la consecuencia se notó en el resulta. “Bilardo me dijo: ‘Te iba a pasar’. Espero que no me vuelva a suceder”, admitió Maradona después del papelón.

Juan Pablo Carrizo; Javier Zanetti, Martín Demichelis, Gabriel Heinze, Emiliano Papa; Lucho González, Javier Mascherano, Fernando Gago, Maxi Rodríguez; Lionel Messi y Carlos Tevez fue el equipo que arrancó en el Hernando Siles. A los 11 minutos, ya estaba 1-0 abajo por un gol de Marcelo Martins, pero un remate de larga distancia de Lucho González puso el empate a los 24 del primer tiempo. Argentina no jugaba bien, pero al menos el resultado acompañaba, aunque no por mucho tiempo. Bolivia siguió atacando y se fue al entretiempo ganando por 3-1. Y en la etapa final llegó lo peor para los de Maradona. Di María entró por Maxi Rodríguez y duró apenas siete minutos: fue expulsado por un patadón y si el panorama era complicado, imaginen con un hombre menos.

La selección local armó su propia fiesta con un conjunto argentino totalmente perdido y desorientado. Messi falló las dos oportunidades que tuvo, Carrizo se comió seis, pero tapó otros tantos para evitar que la vergüenza no fuera aún mayor. Apenas Gago logró hacer pie en la altura, pero no tuvo a ninguno que tocara su misma sintonía y así el 6-1 contra el anteúltimo de la tabla hasta terminó siendo un resultado barato para lo que fue la actuación de la Selección en aquella tarde de Eliminatorias.

Esa derrota dejó a Argentina en el cuarto lugar cuando habían transcurrido 12 de las 18 fechas para llegar a Sudáfrica. Paraguay, con el Tata Martino como DT, estaba en lo más alto con 24 unidades, después venía Brasil (21), Chile con Bielsa al mando (20) y la Selección de Diego sumaba 19. Hasta ahí los cuatro que entraban directo al Mundial y un escalón más abajo, Uruguay (17) entrando al repechaje. La clasificación para el equipo de Maradona llegaría en la última fecha, sufriendo ante Uruguay en Montevideo, días después del empate agónico frente a Perú, aquella noche del gol de Palermo bajo una lluvia torrencial en el Monumental.