Gallardo no se va más

La historia de River es riquísima desde antes de la llegada de Marcelo Gallardo a la dirección técnica del equipo. Ya había logrado ser el más campeón de Argentina, campeón de América y del mundo, así como de varias copas internacionales. Pero es justamente por eso que Gallardo es más gigante aún.

Gallardo tendrá su estatua en la puerta del Monumental. Un espejo a la de Ángel Labruna. Mismo peso y tamaño. Nunca se irá de River. Saber si dejará de ser el entrenador o no después de diciembre es imposible a esta altura. Pero seguro es que no se irá. Ha dejado demasiado.

Son quince finales en cinco años. Una animalada. Yo soy alguien que no cree tanto en la influencia de los entrenadores. Considero que son un 20% a 25% de la historia; que el resto es de los jugadores. Pero acá me rindo. Gallardo es mucho más que eso. Por influencia en sus jugadores. En los hinchas. En los dirigentes. En los rivales. En los periodistas. En todos.

Marcelo Gallardo jamás se irá de River. Hace historia de la historia. Sobresale en los sobresalientes. Es una estatua. Pero es de verdad.