Imagen ilustrativa sobre TNT Sports

Mirá todos los partidos del fútbol argentino en vivo.

SUSCRIBITE
Nacional

Di Stéfano, el otro del podio con Maradona y Messi

Se cumplen seis años de la muerte de don Alfredo, el crack que debutó en River y que se transformó en el ícono del Real Madrid que fue campeón de Europa cinco temporadas seguidas. Era el presidente honorario del club español cuando falleció a los 88 años

Por Federico Del Río

Muchos de los que lo vieron jugar aseguran que fue mejor que Maradona. La FIFA lo reconoció como uno de los cuatro futbolistas más importantes del siglo XX junto a Diego, Pelé y Cruyff. Y fue uno de los grandes responsables de transformar al Real Madrid de grande a gigante. No por nada ostentó el título de presidente honorario del club merengue hasta el día de su muerte, el 7 de julio de 2014, a los 88 años, después de haber sido internado dos días antes por un paro cardíaco. Alfredo Di Stéfano es parte grande de la historia del fútbol, no sólo argentino sino mundial.

La Saeta Rubia, como se lo conoció mundialmente, había nacido el 4 de julio de 1926. A los 19 años debutó en la Primera de River, estuvo un año a préstamo en Huracán y regresó a Núñez para reemplazar a Adolfo Pedernera. En el 49, fue uno de los tantos futbolistas que emigraron al fútbol colombiano que pagaba mucho más que el tope salarial que se había impuesto en Argentina. Allí dejó su marca en Millonarios hasta que en el 53 fue transferido al Real Madrid y comenzó a escribir su historia más excepcional.

Di Stéfano fue el líder del equipo que obtuvo de manera consecutiva las primeras cinco Copas de Europa (la actual Champions), además de una Copa Intercontinental, ocho ligas españolas, una Copa de España y dos Copas Latinas. Fue responsable directo de la época más gloriosa del Real. Fueron 11 años los que vistió la camiseta blanca (de 1953 a 1964), festejando 308 goles en 396 partidos. Una marca impresionante que demuestra la calidad y la preponderancia que tenía dentro del equipo. Porque no sólo era implacable en el arco rival, sino que era líder y atacaba tanto como también ayudaba a recuperar la pelota.

Sus últimos dos años como futbolistas fueron en el Espanyol de Barcelona, donde se retiró en 1966. Durante su carrera jugó en la Selección Argentina (ganó el Sudamericano 47) y también en la española (a partir de 1956), aunque le quedó una cuenta pendiente: jugar un Mundial. Se perdió el del 50 y 54 porque Argentina no participaba en ese entonces, no logró clasificar con España al del 58 y en el 62 se lesionó días antes del debut y no entró en ningún partido. Poco tiempo después de colgar los botines inició su carrera como entrenador en el Elche. En España también dirigió al Valencia, Rayo Vallecano, Castellón y, claro, al Real Madrid con el que ganó la Supercopa de España en 1990. Y también tuvo su paso por Argentina, donde ostenta un logro que nadie pudo repetir: fue campeón con Boca (Nacional 69) y River (Metro 81).

Los reconocimientos del Real Madrid para Di Stéfano han sido innumerables. El estadio de la ciudad deportiva, adonde el equipo de Zidane está haciendo de local actualmente, lleva el nombre de don Alfredo, que desde el 2000 hasta su muestre fue el presidente honorario del club y estuvo en la presentación de cada una de las estrellas que llegaban al club para entregarle la camiseta merengue. De Zidane a Cristiano Ronaldo, pasando por Figo, Ronaldo, Beckham, Owen, Benzemá y otros tantos que no querían perderse la oportunidad de darle la mano y abrazar a ese mito que empezó a patear la pelota en las calles empedradas de Barracas…

Lo más Visto