A 52 años de la mayor tragedia en fútbol argentino

La tragedia de la Puerta 12 ocupa las páginas más oscuras del fútbol argentino por la cantidad de muertes que se produjeron ese 23 de junio de 1968 en el estadio Monumental y también por todo lo que ocurrió después. La impunidad y el olvido. Las crónicas futboleras dirán que ese día se disputó la fecha 17 del Torneo Metropolitano y que el superclásico finalizó 0-0. De un lado estaban Amadeo Carrizo, Roberto Matosas y los hermanos Onega, y del otro, Silvio Marzolini, Antonio Rattín, Norberto Madurga y Angel Clemente Rojas, entre otros. Pero la desgracia ocurrió después de los 90 minutos, cuando los hinchas quisieron salir para regresar a sus casas.

Al momento de la descongestión de las tribunas, los hinchas que bajaron las escaleras de lo que era la puerta número 12 quedaron atrapados en una trampa sin salida. A pesar de los años que transcurrieron, nunca se estableció si el motivo fue que la puerta estaba cerrada, si el problema estuvo en que no habían sacado los molinetes o si la represión de la Policía sobre la avenida Figueroa Alcorta hizo que quisieran volver a subir y se produjo esa avalancha en la que 71 personas de entre 13 y 35 años murieron aplastadas y asfixiadas.

La Justicia de aquel momento no hizo demasiado para esclarecer el hecho. Era tiempos del gobierno de facto de Juan Carlos Onganía y la versión de la represión policial se sostenía a partir de que los hinchas de Boca habían estado cantando la marcha peronista, prohibida por entonces. En agosto de 1968, dos meses después de la tragedia, se dictó la prisión preventiva para el intendente y capataz del estadio Monumental, además de un embargo de 200 millones de pesos contra ellos y River. Sin embargo, fueron sobreseídos a fines de noviembre de ese mismo año y también se levantó el embargo.

Las consecuencias judiciales tampoco son claras, como los motivos de la tragedia. Siempre se habló de dos familias que habían hecho juicio y que llegaron a cobrar 50 mil dólares a la AFA y a River. Pero en 2008, una abogada dijo que 34 familias también habían llegado a un acuerdo con las instituciones, pero que parte del acuerdo era el silencio. Una década después, en 2018, Carmen Palumbo (abogada que representó a muchos familiares de las víctimas) dijo que eran 68 o 69 sus representados y que todos habían cobrado una indemnización, algo que fue desmentido por al menos una familia.

En la actual puerta M de la tribuna Centenario hay una pequeña placa que recuerda el hecho, aunque no menciona los nombres de los 71 hinchas que murieron en aquella desgraciada jornada. En 2018, cuando se cumplieron 50 años de la tragedia, en Boca pidieron disculpas por no recordar año a año a aquellos fallecidos y prometieron comenzar a hacerlo al punto tal que la actual Comisión Directiva, a pedido de la Asamblea de Representantes, tiene un proyecto para solicitar en la AFA no disputar más partidos cada 23 de junio.