La dirigencia de San Lorenzo tomó una drástica decisión sobre el futuro del mediocampista Juan Ramírez: tras no presentarse a jugar ante Arsenal, entrenará apartado del grupo principal

En horas de la tarde del domingo estalló el escándalo en Sarandí: en la previa del partido que debían jugar el local y San Lorenzo por la primera fecha del Torneo de la Liga Profesional, se conoció que el mediocampista Juan Ramírez (28) no se había presentado pese a estar entre los concentrados del entrenador Paolo Montero. Ahí comenzó un culebrón.

Porque el Ciclón, rápido de reflejos, convocó a una escribana para que certificara un supuesto abandono de trabajo por parte del futbolista. Mientras tanto, el manager azulgrana Paulo Cetto acusaba a Boca de malos manejos respecto al futuro del jugador, al tiempo que admitía negociaciones con River por su pase.

Todo siguió tras el empate en uno, cuando Montero declaró que lo que pasó con Ramírez "es una decisión que ha tomado el jugador. Deja de ser parte mía, serán los dirigentes los que tomen las medidas. Lo que se vivió ayer no es normal". Hoy por la mañana, el mediocampista se presentó a entrenar. Ahí, San Lorenzo tomó una determinación.

Desde el club afirmaron que, pese a reintegrarse al plantel, Ramírez no entrenará con el grupo principal sino a contraturno, apartado de la consideración del entrenador. La idea es terminar de negociar su transferencia, con el Xeneize y el Millonario ofreciendo menos que lo que el Ciclón pretende para dejarlo ir. Algo queda claro: Juan Ramírez no volverá a ponerse la camiseta de San Lorenzo.